VIRAL
por Un hombre se cansó de que los conductores excedan las velocidades máximas permitidas en la calle de su casa y tomó una decisión insólita: instaló un radar falso para que, a fin de evitar multas, bajen la marcha.
Este curioso hecho se dio en un barrio residencial de Maryland, Estados Unidos. No se reveló la identidad del hombre, pero se supo que la administración pública había recibido varias quejas de los vecinos de la zona por los excesos de velocidad.
En el interior del supuesto radar lo único que había eran libros. Éstos formaban parte de la biblioteca gratuita de mitad de calle que forma parte del decorado habitual de las ciudades en algunos países.
La carcasa del radar se construyó en madera contrachapada y plexiglás para que al paso resulte muy parecido a los radares “legales”. Se pintó en un tono de gris oscuro y se acompañó de un cartel que indica que hay un radar en ese punto.
El condado de Montgomery retiró el cartel que indicaba la presencia de un radar y dijo que la biblioteca no podía quedarse en el lugar en el que había sido instalada. Mientras tanto, la Policía dijo que la ubicación no había sido aprobada “para una cámara de velocidad”, incluso si ésta era falsa.
“No tengo idea de quién lo puso allí, pero pensé que era divertido”, dijo Matthew Fairbank, vecino de McComas Avenue, en declaraciones a WUSA9. Fairbank también contó que el auto de su esposa perdió tres espejos retrovisores y que los de los vecinos han sido golpeados por otros conductores que circulan a gran velocidad. Algunos vecinos aseguran que los vehículos viajan a entre 65 y 80 km/h por esta calle residencial.
EL CONDUCTOR DE UN MICRO ESCOLAR ABANDONÓ A 18 NENES EN PLENA RUTA PORQUE SE PORTABAN MAL
Un hecho insólito generó preocupación entre los vecinos de Queensland, Australia. El conductor de un micro escolar abandonó a 18 niños de entre 5 y 12 años en medio de la ruta y a 10 kilómetros de su destino.
El dramático episodio ocurrió el viernes pasado pero se dio a conocer en las últimas horas. De acuerdo a lo relatado por la madre de uno de los chicos, los estudiantes fueron hallados deambulando por las calles durante la madrugada.
Los alumnos, que pertenecen a tres escuelas distintas, contaron el calvario que vivieron. “Un par de niños pelearon durante un par de segundos. Entonces el hombre se detuvo y nos preguntó quiénes eran”, contó al medio A Current Affair Emily, una nena de 12 años que estaba en el vehículo.
Tras ello, varios estudiantes señalaron a los responsables y el conductor siguió su camino, pero cuando los vio pelear nuevamente les pidió que se detuvieran y les ordenó que se bajaran todos del micro. “Se detuvo y se bajó del autobús y no quiso volver a subir y luego nos echó a todos”, señaló la pequeña. “Realmente no sabía qué hacer cuando sucedió”, agregó.
Ellie, su hermana de 7 años, que también estaba en el lugar, sostuvo: “Fue como un largo camino desde casa y estaba realmente asustada”.
La madre de ambas nenas remarcó que “fue muy peligroso” lo que vivieron. “Me enferma pensar en ello, lo que hizo el conductor es imperdonable”, sumó. “Ella (Emily) solo nos dijo dónde estaban debido a un perro que habíamos rescatado recientemente, así que sabíamos dónde era el lugar”, contó la mujer que fue a socorrer a los menores.
Otra madre también contó que en medio de la madrugada recibió una llamada de sus hijas pidiéndole ayuda. “Casi los atropella un automóvil, fue bastante aterrador”, dijo.
Tras el dramático momento, Translink, la empresa de micros que transportaba a los estudiantes, confirmó que el conductor ya no trabaja para ellos.
“Translink solicitó al socio de entrega Bus Queensland que investigue este incidente después de recibir quejas de los padres”, detallaron en el comunicado y agregaron: “Bus Queensland ha tomado medidas disciplinarias inmediatas contra el conductor, mientras se revisa el incidente y los eventos que lo llevaron a él. Translink se disculpa por la angustia causada por este incidente y no cumple con nuestras expectativas de los socios de entrega”.
Fuente: Todo Noticias.
